Conoce a Nicolás Oyarce, curador de la 17 Bienal de Artes Mediales de Santiago

Con mucha alegría, les presentamos al curador de la 17 Bienal de Artes Mediales de Santiago, Nicolás Oyarce Carrión, artista chileno transdisciplinario, destacado tanto local como internacionalmente en la dirección de arte para cine, video, performance, teatro, museos y exposiciones, quien es fundador del Museo del Hongo, proyecto que procura la transmisión de conceptos del Reino Fungi y la micología en el arte.

Actualmente Nicolás dirige la Escuela de la Intuición de la CChV, programa de comunidades y aprendizajes que propone estrategias y metodologías basadas en la educación no formal y el aprendizaje crítico en artes, ciencias y cultura digital.

“La 17 Bienal de Artes Mediales propondrá intervenciones improbables enfocadas en la importancia de la cultura como un espacio para la discusión política y la creación de estrategias que inspiren diálogos radicales entre mundos aparentemente dispares, entre especies compañeras. Debemos crear un espacio donde el arte y la ciencia convergen para imaginar nuevas formas de explorar cómo las ecologías (naturales, sociales, digitales y simbólicas) se interconectan y coevolucionan en un mundo mediado por tecnologías electrónicas y narrativas transdisciplinarias”, comparte el curador.

Nicolás es miembro de la Academia de las Artes Cinematográficas de Chile, que promociona y difunde obras y profesionales del cine chileno. Recientemente fue el responsable de la dirección de arte de la película «Denominación de origen» (2024) de Tomás Alzamora, largometraje que ha tenido gran éxito en las salas de cine del país. Desde el 2013 realiza investigaciones sobre las estéticas del poder, cuestionando la relación entre los imaginarios de la naturaleza y las nuevas tecnologías corporales desde la identidad de género. 

«Entre los límites de lo posible y lo imposible, esta labor curatorial es un ejercicio tan físico como creativo, que cruza territorios y realidades con la intensidad de una constante fricción entre lo imaginado y lo vivido. El enfoque artístico lo he descrito como una forma de voyeurismo emocional, incluyendo en aquel relato oficial de las artes electrónicas algunas narrativas curiosas, impredecibles, que dislocan el binomio de género y que nunca habían sido abordadas en la historia de la Bienal», cuenta el curador.

Escogido desde la CChV como curador de esta nueva versión de la Bienal de Artes Mediales de Santiago, Nicolás ha estado trabajando intensamente estos últimos meses junto a un Consejo Curatorial, artistas y el profesional equipo de la CChV, para dar vida en octubre de 2025 a un programa de experiencias, exposiciones y actividades cuyo eje abordará cómo las verdades son construcciones marcadas por el poder, el género y la territorialidad.