La Escuela de la Intuición, el programa de aprendizajes y comunidades de la Corporación Chilena de Video y Artes Electrónicas, presenta El umbral de los sueños, un artefacto metodológico que a través de una bitácora y un kit de juegos y materiales, propone a niñas, niños y jóvenes la exploración del lenguaje de los sueños, incentivando prácticas de autocuidado y comunidad.
Cada caja contiene una bitácora impresa y materiales como pegamento, telas, hilos, lápices de cera, una linterna, dados y un set de imágenes para collage, que ayudan a aplicar las actividades del libro que, durante siete noches, propone ejercicios para reflexionar en torno al mundo de lo onírico, y aprender a descansar y cuidar de cada una/o para conseguir un buen dormir.
Para poner en práctica esta metodología, se han distribuido kits a niñas, niños y jóvenes de Cecrea Vallenar, Coquimbo y Punta Arenas, con los que facilitadores de cada territorio brindan un acompañamiento. Las y los participantes tuvieron la oportunidad de conocerse en línea, compartiendo sus creaciones y experiencias en torno a este laboratorio y el ejercicio de soñar.
Con el fin de abrir esta metodología a través de las distintas plataformas de Cecrea y la CChV se desarrollaron tres cápsulas bajo la lógica del házlo tú mismo y házlo con otrxs, que incluyen lenguaje de señas, las cuales son ofrecidas para libre descarga junto a todo el material digital para poner en práctica El umbral de los sueños.
¡Puedes descargar tu bitácora aquí!
El juego de las sombras
En tiempos antiguos, cuando el fuego y las estrellas eran las luces que reinaban en la noche. Las personas aprovechaban esa danza misteriosa de sombras para crear historias que imaginaban otros mundos. La oscuridad está llena de posibilidades, ¡vamos a descubrirlas!
Cuerpo y albergue
Podemos considerar nuestro cuerpo e imaginación como un lugar al que regresar cada día, luego de haber pensado en muchas cosas y haber estado haciendo diferentes actividades. ¡Intentemos habitar ese lugar que somos!
Muñequitas quitapenas
En el origen de la cultura guatemalteca, las muñequitas quitapena estaban destinadas a aliviar las angustias nocturnas de niños y niñas, encontrando en los sueños un espacio de regeneración e incluso respuestas a los problemas. Estas muñequitas son siempre seis: una para cada día de la semana, excepto el domingo que es cuando descansan. ¡Te invitamos a fabricarlas!