Mujeres fundadoras de la CCHV: comprometidas con las artes mediales

Conmemorando el Día Internacional de la Mujer, hoy destacamos a dos mujeres artistas que dieron vida a la Corporación Chilena de Video en 1993: Lotty Rosenfeld Villarreal y Magali Meneses Ibáñez.

En 1993, un grupo de ocho artistas constituyeron legalmente la Corporación Chilena de Video, cuya creación respondió a la necesidad de dar continuidad al legado del Festival Franco-Chileno de Videoarte, una acción que era parte de la política cultural exterior del gobierno de François Mitterrand. Este festival -que se realizó entre 1981 y 1990- representó un hito para la difusión y desarrollo de las artes mediales en Chile, pues ofrecía un espacio de libertad creativa y diálogo entre artistas de ambas nacionalidades, en plena dictadura civil-militar.

Con la necesidad de mantener ese espíritu y desarrollar las prácticas experimentales del video, la Corporación reunió a algunos antiguos participantes de la Sociedad Chilena de Video, entre ellos Nestor Olhagaray.  Junto con Juan Forch, Sergio Navarro, Claudio Sapiain, Francisco Fábrega y Andrés Acuña, dos mujeres destacaban en los estatutos como socias fundadores: Lotty Rosenfeld Villarreal (1943 -2020) y Magali Meneses Ibáñez (1950).

Ambas artistas, desde distintas veredas, se comprometían así con la conformación de la Corporación Chilena de Video, desde donde lograron desarrollar la Primera Bienal de Video del país, un hito para la difusión y desarrollo de las artes mediales en Chile, de la que hoy ya van 16 ediciones. 

Desde distintas veredas

Lotty Rosenfeld es una destacada artista visual adscrita al neovanguardismo y a la denominada Escena de Avanzada, movimiento que se gestó en la escena cultural chilena tras el golpe militar de 1973. Integró el Colectivo de Acciones de Arte (CADA) junto a Juan Castillo, Diamela Eltit, Raúl Zurita y Fernando Balcells, con quienes entre 1979 y 1983 realizó polémicas obras en el espacio público como resistencia a la dictadura. En 1979 realizó la intervención Una milla de cruces sobre el pavimento, instalando un género blanco sobre las líneas intermitentes de la calle, formando un signo +. La acción la replicó en puntos internacionales de gran poder político y económico como la Casa Blanca en Washington DC o el Arco del Triunfo en París. Participó además del movimiento Mujeres por la vida, filmando entrevistas a pioneras del feminismo chileno junto a Diamela Eltit, archivo que fue donado a la Universidad Católica. Sus obras están en el Museo Reina Sofía de España, el MoMA de Nueva York y en la Tate Gallery de Londres, entre otros.

En tanto, Magali Meneses es académica, directora, guionista y fotógrafa chilena, autora de una extensa producción de documentales y videos. Entre sus trabajos se encuentran Todas íbamos a ser reinas (1983), Wichan (1994) La pichanga (1994) y El ojo limpio (1995), este último en homenaje a Gabriela Mistral. Además de su trabajo en cine, Magali Meneses también ha trabajado en producciones televisivas, incluidos diez “telefilmes” de la serie Laberinto, realizados para Televisión Nacional de Chile.  También ha mantenido una destacada carrera docente en la Universidad Arcis de Valparaíso, y en la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños, Cuba. Ha ganado numerosos premios nacionales e internacionales y es constantemente invitada a participar como miembro del jurado en concursos y festivales de cine. Actualmente ejerce como realizadora independiente.

Las artistas y las Bienales recientes 

En la versión 15 de la Bienal, realizada en 2021, se expuso la obra “Proposición para (entre) cruzar los límites” de Lotty Rosenfeld.  En este video, la artista registra la performance de las cruces sobre el pavimento en límite fronterizo entre la República Democrática Alemana y la República Federal de Alemania, donde la artista ocupa esta vez su cuerpo como eje. Rosenfeld produjo esta pieza audiovisual en el marco de una exposición realizada en 1983 en Alemania bajo el título Chilenas. Drinnen und Draußen. 40 Künstlerinnen zum Thema Zenzur und Exil (Dentro y fuera: 40 artistas chilenas bajo el tema de censura y exilio), que buscaba dar cuenta de las artistas residentes en Chile y aquellas que fueron exiliadas tras el golpe militar de 1973. A su regreso al país, la autora quiso mostrar la obra en la tercera edición del Festival Franco Chileno de Videoarte, pero el Consejo de Calificación Cinematográfica de la época la requisó, clasificándose como propaganda contra el régimen.  

En tanto, en la edición 16 de la Bienal de Artes Mediales, realizada en 2023, se exhibió el video “La comida” (1983) que realizó Magali junto a la artista visual Sybil Brintrup (1954  2020). En esta icónica obra, ambas artistas preparan y consumen de manera contemplativa y sugerente pipas y moluscos (piure chileno). Los alimentos que aparecen en la secuencia se asemejan a una masa de órganos dentro de su cobertura rocosa, dando un especial protagonismo al acto cotidiano que implica la preparación de estas comidas típicas. Esta obra ganó el Primer Premio Festival de Video Creativo y ha sido recientemente revisitada y homenajeada por nuevas generaciones de artistas.

Próximamente, publicaremos el libro de la Bienal más reciente, donde se incorpora esta última obra.